Una noche de confidencia, hace apenas unos meses, Lionel Wallace me contó la historia de la puerta en el muro. Y en aquel momento pensé que, al menos para él, era una historia verdadera.
Me lo contó con tal naturalidad y convicción, que no pude más que creerle. Pero a la mañana siguiente, en mi propio apartamento, la atmósfera era distinta. Mientras estaba tumbado en la cama, recordaba las cosas que me había contado, desnudas ya de la magia de una voz solemne y pausada, despojada de la tenue luz de la lámpara, de la atmósfera de misterio que nos envolvía, de los detalles exquisitos, el postre, las copas y la mantelería de la cena compartida, que daban al momento un aire deslumbrante, aislado de la realidad cotidiana.
«¡Me ha engañado! -me dije-. ¡Qué bien lo ha hecho…! Es la última persona de la que habría esperado un engaño tan bien urdido.»
La puerta en el muro // H. G. Wells
Éstas son las primeras palabras de La puerta en el muro de H. G. Wells. Y son las primeras que leí en cuanto tuve en mis manos el libro. Éste estaba sobre la mesa de entrada de mi biblioteca, ésa a la que me voy directamente con solo pisar el lugar.
Nada de leer sinopsis previamente, me atrapa más leer las primeras páginas de un libro y ojearlo por dentro. Por eso es que a veces me encuentro con sorpresas bonitas dentro de un libro, que sin haberme percatado estaban escritas como un enorme spoiler en su sinopsis. En mis manías de lectora las sinopsis se leen casi terminando el libro. O ni se leen.
Pues fue con estos tres párrafos con los que caí atrapada. Tenía que leerlo. Y el libro es tan cortísimo que pensé en hacerlo allí mismo, de pie frente a la mesa y en la puerta misma de la biblioteca. ¡Ay! Si yo tuviera el mismo tiempo que tenía más joven, qué gustazo me habría concedido. Como único remedio se vino a casa y esta mañana, mientras J ha hecho uso de su desayuno concedido por una misma, lo he leído. He terminado antes que él.
Y ahora me encuentro aquí, escribiendo sobre La puerta en el muro, una historia que he considerado relato, de tan sólo 54 paginitas de letra grande. Pero me he dicho a mi misma que quiero traer al blog los libros que lea en este 2020, y éste es uno de ellos. Además, estoy empezando a adquirir una cierta soltura a la hora de hablar sobre un libro del que no quiero contar mucho o sencillamente, no se puede contar mucho. Tal vez esto de ESCRIBIR semanalmente no os llene, por el contenido, a las qué leáis desde el otro lado, pero a mi me esta viniendo fenomenalmente como ejercicio. Véase el ejemplo.

Y ya centrándome un poco, ¿os dais cuenta de la musicalidad de los tres primeros párrafos del libro? ¿No te sumergen enseguida en una historia nueva? Hecho muchísimo de menos esta sensación en libros que se publican actualmente. Por detalles como este es que a veces pienso que antes se escribía mejor. Supongo que el pensamiento no es el adecuado, más bien es que el modo en que se escribía antes a mi me atrapa más. ¿Se sigue publicando algo parecido? Lanzo mega reto para las que me leéis a ver si alguna me aconseja libros actuales con este tipo de escritura. Si existen.
Para él, la puerta en el muro era una puerta real que conducía a una realidad inmortal a través de un muro también real. Ya no me cabe la menor duda.
La puerta en el muro // H. G. Wells
Cómo no puedo comentar demasiado debido a su extensión os diré que me ha recordado a alguna serie o película, no sabría decir, dónde ha aparecido un jardín oculto y encantado. ¿Os suena, no? Pero eso ha sido al principio. Después me he enfrascado en crear una teoría en mi cabeza de por qué el protagonista de la historia veía esa puerta. Creo que eso es lo que recordaré más de este libro: ¿por qué la veía?.
En el final se plantean preguntas, pero yo incluso llego a interpretar otras. ¿Era ese el propósito del autor o no? Y esa es una de las dudas que a veces quedan en mí cuando leo determinados libros. No me queda otra que seguir leyendo a H. G. Wells para conocerlo mejor y que así me dé alguna que otra pista. Que el hombre no se quedó parado, es el autor de libros tan famosos como La máquina del tiempo, El hombre invisible o La guerra de los mundos: ¿se han hecho películas sobre todos? Perdonadme entonces si soy una inculta total por no conocerlo y saber interpretarlo bien, pero aún tengo tiempo. Tal vez descubra ¡¿por qué veía esa puerta?!
En serio ya, no sé si aconsejaros este libro. Es una cuestión de feeling. Conmigo lo tuvo y además me ha encantado leerlo, pero siento que me ha quedado una asignatura pendiente con él: leer más a su autor. Algún día le pondré remedio.
Por cierto, #yomequedoencasa . Ojalá esto tan sólo sea un recuerdo no demasiado duro que contar a nuestros hijos.
2 Comments
Qué bien te explicas, M. Ángeles. Comparto esa sensación que transmiten ciertos autores (especialmente los del siglo XIX), esa musicalidad de la que hablas, la cadencia, la magia de la narración. Me vienen a la cabeza Poe, Dickens, Verne, Dumas, me pasó el otro día con Galdós. Quizá hoy en día, bien por la depuración del estilo, o por cierta artificialidad o por ese escribir igual que se habla (que a mí particularmente me revienta bastante) se ha perdido parte de ese virtuosismo decimonónico (aunque, y eso es lo bueno, no los hemos perdido, seguimos volviendo a ellos).
No he leído La puerta en el muro, pero me has contagiado las ganas, y me alegro de que estés disfrutando escribiendo porque es un disfrute leerte. ¿Sabes? No creo que haya que tener todas las respuestas, ni al leer ni al escribir, la mayoría de las veces basta con hacerse las preguntas. Y una respuesta sí me la sé XD todas las novelas que citas tienen película. La versión de La guerra de los mundos con Tom Cruise es soprendentemente aceptable (es que con Tom no tengo término medio o me encanta o no lo soporto), La máquina del tiempo tiene varias versiones, pero mi favorita con diferencia es la de 1960 ❤️ ), y ahora estrenaban una revisión de El hombre invisible. Así que tienes razón de nuevo, Wells da para muchas lecturas y me encanta que hayamos coincidido con él.
Y ya me corto que me embalo y no veo el fin. Gracias por el ratito de charla y por la energía positiva. Esto también pasará y lo contaremos (aunque no tan bien como Wells, ni falta que hace XD)
Tu te explicas mejor 😉 «la cadencia, la magia de la narración». De todos los autores que dices, que soy una inculta, solo he leído a Poe y tan sólo leí un pequeño cuento, concretamente «La caída de la casa Usher» y precisamente comenté en GR que me había encantado su musicalidad. A mi me encantaría leer algo parecido en la actualidad, para mi sería un valor añadido para leer el libro. Dices «seguimos volviendo a ellos» y ahora me queda la duda de si es en forma de lectura o tu, como autora, lo ves en otros compañer@s.
Estoy muy de acuerdo contigo en que no hay que tener todas las respuestas. A veces incluso pienso que el autor juega con nosotros para que pensemos. Y aunque alguna que otra vez me quede con la sensación de que no he comprendido todo, que me quede con preguntas a mi me encanta. También me hace ponerlo directamente en la lista de re-lecturas, para ver si en el futuro lo comprendo mejor.
Si, de «El hombre invisible» vi que la protagonista era la misma que en «El cuento de la criada». Y a Wells lo volveré a leer, entre los que más me llama es «La guerra de los mundos», pero no sé por dónde seguiré.
Lo contaremos toooodo cuando acabe, también lo contaremos por años. Cuídate mucho, mucho, seguro que tendrás muchos proyectos a los que le puedes dar forma aprovechando la cuarentena, incluso tal vez ésta aparezca en un futuro libro. Besazo grande.