¡Hola!
Bajo el sol de medianoche de Marisa Grey fue el libro elegido para nuestra última lectura conjunta en #Deviajeliterario. Yo, mil veces agradecida a este club que me está haciendo leer a autoras españolas. Ahora es cuando me doy cuenta de lo poco que las leía.
Soy una total novata leyendo a Marisa Grey. Me gusta indicarlo, entre otras cosas, porque es algo a lo que le doy bastante importancia. Cuando no conozco la obra de un autor, he de reconocer que inconscientemente, soy más exigente con éste. Analizo más todo el libro: su estructura, los personajes, lo que me ha hecho sentir… Sin embargo, si conozco su forma de escribir, le busco más el sentido a por qué escribió el libro así o «asao» y suelo ser más permisiva.
Dicho lo cual, empiezo con Bajo el sol de medianoche.
Lilianne Parker decide viajar hasta el Yukón tras descubrir por casualidad que su marido Cooper Mackenna sigue vivo. Su intención de casarse es imposible si éste no firma el divorcio. Allí, un territorio totalmente desconocido, encontrará a un Mackenna también desconocido. Los nueve años de separación han pasado factura en ambos y esto les complicará aún más el difícil objetivo de llegar a un acuerdo.
Marisa Grey nos hace una localización y ambientación brutal del territorio del Yukón a modo de presentación. Para mi sí que es importante que la autora haya dedicado tantas páginas a explicarnos la vida, el ambiente y las duras condiciones por las que tuvieron que pasar esos hombres y mujeres que decidieron hacer una maleta y poner su vida en juego para buscar oro. Marisa Grey lo explica tan bien, que el Yukón y todo lo que le rodea, se convierte en un personaje más de esta historia. Tercer protagonista, diría yo. Además, he notado algo: Grey ha conseguido que el libro me parezca muy visual. No sé si a las chicas del CDL les ha pasado como a mí y le han venido a la cabeza mil imágenes de ese pueblo lleno de barro, de esos hombres demacrados, de esas bolsitas de oro, de una cabaña rodeada de bosque… Para mí ha sido como ser testigo desde las alturas, cenitalmente, y no me cabe duda que la culpa de todo la tiene Marisa Grey, por describirlo como lo hace. Un 10.
Conforme avanza la historia, empiezan a aparecer personajes. Malos, muy malos. Y a mí me crearon tal nivel de exaltación que era imposible abandonar el libro. Una «enganchada» de las buenas.
Esa tensión creada por los secundarios, ayuda a que «el mes» que deciden pasar juntos Liliane y Cooper, sea aún más emocionante. Me ha encantado el espacio que Marisa Grey da a los dos protagonistas. Que sea así, que les costara tanto comunicarse, que dijeran blanco cuando querían decir negro, que no quisieran acercarse el uno al otro… todo eso, da profundidad y magnitud al amor que sentían el uno por el otro. Que no fuesen capaces de hablar sobre algo que había marcado la vida de ambos, nos dice muchísimo del dolor que realmente sentían. De nuevo un 10.
Y es entonces cuando llega la tormenta en el Yukón. La tormenta de acontecimientos, quiero decir. Todo el que lea Bajo el sol de medianoche sabrá de qué hablo. «El momento Lashka» para mi ya es imborrable. No lo esperaba para nada y me ha dolido en el alma. Mar de lágrimas en el momento en que Lilianne «vuelve» con ella. Hay que avisar de esto, Grey, tenemos que prepararnos.
Y fin. Porque para mí, el libro está casi terminado en este punto. De verdad, no entendí cómo quedaban tantas páginas cuando yo ya sentía un libro redondo.
Marisa Grey traslada entonces a los protagonistas a San Francisco, para que resuelvan aquello que los separó. ¿O simplemente lo hace para que Lilianne pueda hablar con Aidan, su prometido, y pedirle perdón? No lo sé, porque todo lo que sucede en San Francisco yo no lo he entendido. Creo que la autora se saca de la manga una trama familiar demasiado rocambolesca {y dura} para mi gusto y pone a nuestros dos protagonistas de meros espectadores. Ninguna explicación, ni si quiera una acción que haga cambiar las cosas: Lilianne y Cooper sólo miraban. Quiero darle un sentido a todo esto y pensar que nuestros protagonistas llegaron a San Francisco con una única misión: salvar a dos niños y salvarse a ellos mismos.
Así que sí, he de aceptar que esta última parte del libro ha hecho que mi valoración sobre El sol de medianoche baje. ¿Lo recomendaría? La respuesta es SI {aunque yo me quedaría en el Yukón}. Porque está muy bien escrito, porque engancha, porque lloras…
Y no me gustaría irme sin comentar dos cosas. Primero, el papel de la mujer en toda la historia. Hay muchos detalles de mujeres muy diferentes que representan a una mujer sin miedos. La principal representante, por supuesto es Lilianne, que se hace a sí misma y sueña con poder estudiar medicina a pesar de estar casada. Me ha recordado mucho a la entrada que publiqué donde hablaba de la importancia de «ser la primera en algo». Segundo, este libro es el ejemplo perfecto de cómo un libro te hace viajar. He viajado imaginariamente, he pensado el trayecto en barco desde San Francisco hasta ese territorio canadiense, y por supuesto, he investigado en internet. Sin duda, #Deviajeliterario ha acertado de pleno al elegirlo. ¡Muy bien compis!
Ya podéis ver los enlaces de mis compis aquí.
10 Comments
¡Hola, M.Angeles!
Se nota mucho mucho que esta reseña la has hecho desde el corazón (pones mucha pasión en todo lo que dices 😉 )
Coincido en muchas cosas contigo y, para mí, la parte que transcurre en el Yukón me parece más atrayente y que la relación entre ellos, con esos tiras y aflojas, te mantiene pegada a las páginas.
Y también creo que hay muchos mensajes, como el papel de la mujer, que sí deben destacarse.
Ha sido un placer compartir esta lectura contigo y más por dejar tus opiniones sinceras, viscerales, incluso cuando parecían ir en contra de la opinión general. Eso es lo que enriquece las lecturas conjuntas.
Un beso.
Hola Lidia!
Contra viento y marea… No es mi propósito, pero bueno, escribo lo que me sale en el CDL. Además, como se suele escribir justo cuando estás leyendo el libro, pues los sentimientos son aún más extremos.
Y cuando me pongo a hacer la reseña, me meto en una burbuja que cualquiera me saca. Supongo que en muchas ocasiones, exageraré…
Echaré de menos tu participación.
Besazo.
Hola M. Ángeles!!!
Yo también era una novata leyendo a Marisa Grey, llevaba tiempo con ganas de leer algún libro suyo y cuando se propuso me pareció perfecto. Me encanta ver que cada uno tiene un punto de vista totalmente diferente y eso hace que la LC sea mejor aún, claro que esta novela daba para hablar largo y tendido sobre ella. Yo también he sentido el Yukón como un protagonista más y he paseado por Dawson, por sus calles embarradas… también me ha gustado más esta parte que la narrada en San Francisco, pero aún así no desmerezco esta última parte. La relación al principio entre Cooper y Lilianne me ha encantado, sus rifi-rafes no tenían desperdicio y el momento Laskha creo que no lo esperaba nadie.
Ha sido un placer compartir lectura con vosotras, que alguien tenga una opinión diferente y que te haga pensar sobre algo desde ese punto de vista es enriquecedor 🙂
Nos vemos en la próxima LC!!
Un beso!!!
Hola Elena!!!
Pedazo de comentario que me has dejado, ole tu!!
Pues si, que opinemos distinto y que lo hablemos y discutamos, es para mi lo realmente interesante del CDL. También parece como que «nos soltamos más» al hablar y que no dejamos títere sin cabeza. Como no hay un formato cerrado con una extensión determinada, cualquiera nos para… Y TODO eso me encantaaaaaaa. Con Bajo el sol de medianoche, ya sabes la que hemos liado.
Cooper y Lilianne lo mejor del libro. El inicio de su relación en el presente, me parece tan real y sentida, que es todo un regalo. Y Lashka… lágrimas.
Besazo enorme, por estar siempre aquí.
Hola, Mª Ángeles.
Muy cierto lo que dices, para mí ha sido muy parecido a cómo tú lo cuentas. Una novela muy visual en la que me costó entrar porque muy en el inicio le faltaba un poco de chispa, todo sucedía muy lento, pero una vez metidos en harina, hubo partes en las que no podía detenerme, sin embargo la segunda parte (la de San Francisco) me pareció un tanto fuera de lugar. Fue como tener entre las manos una segunda novela en la que aparecían personajes de la nada y les sucedían cosas casi más importantes que a los propios protagonistas.
No he reseñado porque tendría que darle dos notas: Una muy alta en narrativa, ambientación y documentación y otra no muy buena en cuanto a trama.
Como siempre es un placer leerte.
Un abrazo.
Hola eMe.
Mil gracias por pasarte por aquí y por tus palabras!!!!!! Ánimos subiendo…
Sé que tu opinión y la mía han paseado de la mano en prácticamente todo el libro. Y me alegra no ser la única oveja descarriada… Es que es eso, ¡otra novela!.
Me parece justo y acertado el que des dos notas a esta novela. La ambientación es fascinante y el libro está escrito de una forma que te atrapa. Pero «ese esquema» de la trama, para mí tiene un desenlace erróneo.
Besazo enormeeee.
holaaa
coincidimos totalmente en la opinion, a mi la ultima parte se me hizo pesada y lenta. Por lo demas un libro 10
besitos
Hola Serena!
Si!!! El libro es de los que lees y al final, no te arrepientes de haberlo leído (a mi me pasa eso con más de uno…).
Está bien escrito, engancha, se te salta alguna lágrima—> Buen libro!!
Yo sólo hubiera quitado parte de ese final.
Besazo.
Hola Mª Angeles,
Me paso un poco tarde pero es que pasan los días que ni los veo…
Coincido contigo en que es una historia muy visual gracias a las descripciones que ha hecho la escritora. Para mi gusto quizá demasiado extensas en cierto momento, pero si, reconozco que han ido genial para hacerte una idea de como era el lugar, de como vivía la gente y también de sentir el frío en nuestros huesos.
A mí la parte del Yukon también me parece más interesante que la de San Francisco, podrían haber sido dos novelas perfectamente.
Un placer haber compartido LC.
Besos!
Hola Lidia.
Si, pueden ser dos novelas totalmente distintas. O una bilogía. Si, los dos libros lo veo y hasta me hubieran dado más sentido a esta historia, porque podría haber explicado San Francisco mejor, y no tan precipitado.
Hay veces que las descripciones se nos hacen pesadas, sobre todo cuando son muy extensas. Yo creo que la autora lo ha hecho así porque su misión era que viajásemos con ella. Por mi parte, conseguido.
Besazo grande!